(Publicado en AJINTEM.COM)
El gobierno no ha nacionalizado Bankia. El gobierno ha nacionalizado un gran agujero La estafa no se reduce, sin embargo, a esta inyección de dinero público para tapar agujeros privados. Miles de pequeños ahorradores han sido engañados y han visto como productos financieros que se les vendían como “inversiones seguras” perdían en unos meses la mayoría de su valor. El caso Bankia es otro ejemplo de como las estructuras de un poder económico altamente burocratizado son capaces de distribuir sus pérdidas entre la población. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) es creado por el gobierno socialista en 2009 para hacer frente a posibles necesidades de liquidez de las entidades financieras. Para tener acceso a la financiación pública se exige que las entidades financieras se fusionen en entidades más grandes; se busca, de esta manera, promover un proceso de concentración de las cajas de ahorros que de lugar a entidades más grandes y supuestamente más solventes. Acogiéndose a esta modalidad en diciembre de 2010 siete cajas de ahorros, entre las que destacan Caja Madrid y Bancaja, se unen dando lugar a BFA (Banco Financiero y de Ahorros) que recibirá 4465 millones de euros del FROB en forma de participaciones preferentes convertibles Con Rodrigo Rato (Bankia) al frente, se pone en marcha la siguiente maniobra: la captación de capital privado de pequeños inversores a través de la salida a bolsa, o lo que es lo mismo, otro nuevo paso en la socialización del gran agujero que todavía tiene Bankia. Las acciones son colocadas a pequeños ahorradores bajo el lema “yo también soy Bankero”. La gran estafa ha funcionado, está completa. La decisión del gobierno ya no es elegir entre salvar el dinero de unos pocos ricos o dedicar los fondos públicos a educación, sanidad, etc. Los fondos de los grandes ricos ya no están ni en BFA ni en Bankia; porque ellos tenían la información para no verse afectados por todo el proceso; porque son ellos mismos los que han diseñado la estafa, en su doble condición de grandes inversores y tecnócratas expertos en el sistema financiero. Los ricos saben donde no tiene que estar su dinero. No como los pequeños accionistas de Bankia.
El gobierno no ha nacionalizado Bankia. El gobierno ha nacionalizado un gran agujero La estafa no se reduce, sin embargo, a esta inyección de dinero público para tapar agujeros privados. Miles de pequeños ahorradores han sido engañados y han visto como productos financieros que se les vendían como “inversiones seguras” perdían en unos meses la mayoría de su valor. El caso Bankia es otro ejemplo de como las estructuras de un poder económico altamente burocratizado son capaces de distribuir sus pérdidas entre la población. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) es creado por el gobierno socialista en 2009 para hacer frente a posibles necesidades de liquidez de las entidades financieras. Para tener acceso a la financiación pública se exige que las entidades financieras se fusionen en entidades más grandes; se busca, de esta manera, promover un proceso de concentración de las cajas de ahorros que de lugar a entidades más grandes y supuestamente más solventes. Acogiéndose a esta modalidad en diciembre de 2010 siete cajas de ahorros, entre las que destacan Caja Madrid y Bancaja, se unen dando lugar a BFA (Banco Financiero y de Ahorros) que recibirá 4465 millones de euros del FROB en forma de participaciones preferentes convertibles Con Rodrigo Rato (Bankia) al frente, se pone en marcha la siguiente maniobra: la captación de capital privado de pequeños inversores a través de la salida a bolsa, o lo que es lo mismo, otro nuevo paso en la socialización del gran agujero que todavía tiene Bankia. Las acciones son colocadas a pequeños ahorradores bajo el lema “yo también soy Bankero”. La gran estafa ha funcionado, está completa. La decisión del gobierno ya no es elegir entre salvar el dinero de unos pocos ricos o dedicar los fondos públicos a educación, sanidad, etc. Los fondos de los grandes ricos ya no están ni en BFA ni en Bankia; porque ellos tenían la información para no verse afectados por todo el proceso; porque son ellos mismos los que han diseñado la estafa, en su doble condición de grandes inversores y tecnócratas expertos en el sistema financiero. Los ricos saben donde no tiene que estar su dinero. No como los pequeños accionistas de Bankia.
En diciembre de 2011 Bankia recibe 15 000 millones del BCE.
En marzo de 2012 recibe 25 000 millones del BCE
Ahora pide mas de 19 000 millones al Estado…
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Es curiosos ver cómo dos entidades, Bancaja (Valencia, “gobernada”
por el PP) y Cajamadrid (Madrid, “gobernada” por el PP), forman parte
fundamental de una fusión de cajas (estimulada por el PSOE) y que ahora NO va a
ser investigada por la gracia de los partidos mayoritarios.
Y a mí, inocente que es uno, me da la impresión que vamos a
pagar entre todos el despilfarro en la gestión de estas dos comunidades
autónomas…
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